Denunciaron que un adolescente fue brutalmente golpeado y en patota en una escuela de Villa Mercedes
La víctima, de 15 años, iba a rendir cuando fue atacado por cuatro jóvenes que asisten al mismo establecimiento.
Este martes por la mañana un adolescente de 15 años recibió una golpiza en el Colegio Epet Nº 18 “Nicolasa Berrondo de Quiroga” de Villa Mercedes. La madre, Belén Nievas fue quien denunció el hecho por los medios de comunicación.
En declaraciones a El Chorrillero la mujer explicó que su hijo fue agredido por cuatro compañeros de entre 17 y 18 años.
“Cuando lo golpearon, el director no se encontraba en el colegio, llegó horas después. Sólo estaba la regente quien me contó que fue una pelea entre dos alumnos, pero todos los compañeros de mi hijo vinieron a decirme que lo agarraron entre cuatro, que lo tiraron al piso, le pegaron piñas y patadas. Algunos preceptores vieron eso y no se metieron a defenderlo”, señaló.
El adolescente terminó con una perforación en el labio, moretones en la cara, una fisura en uno de los dedos de la mano izquierda, dislocación en el tabique y moretones en distintas partes del cuerpo.
“No tengo ninguna explicación de por qué le pegaron. Les pregunté qué vínculo tenían y me contestaron que no tenían ningún problema”, contó.
Nievas cree que el conflicto podría haberse originado porque la novia de uno de los agresores le escribió a la víctima.
“Mi hijo nunca le respondió, siempre la ignoró, pero la chica le habló de esto a su novio, que, en vez de pedirle explicaciones a ella, fue contra mi hijo. Lo empezó a buscar, le quisieron pegar a la salida del colegio el lunes, pero no pudieron. Esto llegó hasta la terminal y ahí discutieron, pero no lograron golpearlo”, relató. Después de eso, se supo que el chico “pidió ayuda por redes sociales a otros estudiantes” para atacarlo al día siguiente.
La mujer radicó la denuncia en la Comisaría del Menor de Villa Mercedes. Y confirmó que este lunes se dirigirá hasta el ministerio de Educación de la provincia para hacer otra exposición.
Dijo que desde la dirección de la institución, la única medida que tomaron “fue suspender” a los golpeadores. Además se quejó porque “ninguno de los padres se comunicó para pedir disculpas por lo que pasó”.
“Mi hijo se encuentra en mi casa, medianamente está bien, tiene la cara hinchada por lo que le cuesta comer, los ojos morados y un poco de dolor de cabeza”, expuso.
En los días posteriores al hecho, alumnos del colegio se organizaron para reclamar a los directivos que “tomen cartas en el asunto” y “reubiquen a los agresores” porque no quieren convivir con ellos, ya que “tienen miedo”. Sin embargo, no obtuvieron respuestas.
Nievas planteó que las autoridades de la institución no permitieron que una ambulancia llevara a la víctima hasta el Policlínico Regional “Juan Domingo Perón” y que recibiera una mejor atención, por eso tuvieron que asistirlo en el lugar, una hora después de la golpiza.
“Le pido al director que se preocupe en estar más en el colegio, asistir a los chicos y no discriminarlos por la falta de vestimenta, que no los ninguneen ni maltraten y les presten más atención para ver qué hacen, porque si hoy pasó esto, mañana puede ocurrir algo peor”, finalizó.